Carta al amor de mi vida hombre

Es uno de esos hombres, sin horarios limitados, sin descansos, es uno de esos hombres a los que una mujer quiere dar una segunda oportunidad de amar.

Él es por quien decidí que quería el amor de los que están siempre, de los que ya no están de moda, de aquellos por los que luchamos.

Es uno de esos hombres que te dejan el último bocado de postre, por los que sientes amor bajo tu piel….

Es uno de esos hombres por los que te olvidas de todo lo demás, es uno de esos que vienen a quedarse, no sé si en mi vida, pero en mi mente, los que se aprovechan de un detalle para robarte el corazón, los que ves en cada pensamiento, o los que te vienen a la mente cuando alguien te habla de la persona más increíble que han conocido.

Carta al amor de mi vida hombre

Desde hace algún tiempo, poco después de enamorarme de ti, siempre he tratado de encontrar la mejor manera de definirte, no sólo a ti, sino al universo de sentimientos y sensaciones que siento, cuando estamos juntos y cuando estoy lejos de ti.

No lo entiendo…

Lo que siento por ti es tan grande, que ni siquiera gracias al sueño más bello, ni al beso más mágico de todos los que puedes darme, puedo encontrar la manera más apropiada de nombrar lo que significas para mí.

No estoy exagerando si te digo que eres pura magia. Lo haces con una simple mirada, un beso o una caricia, sin tener alas, me haces volar y no sólo eso, sino que me transportas a un mundo mágico, en el que florece cada día y crece más y más, el amor que siento por ti.

Tampoco es exagerado decir, que cada día compensa todo el tiempo de mi vida que he estado sin conocerte. Eres increíble, eres el hombre que toda mujer querría tener. Comprensivo, cariñoso, tierno, tierno, dulce e incontables otras cosas que conforman la persona más maravillosa del mundo, que eres.

Te quiero tanto……que la mayor parte del tiempo siento un dolor en el pecho, que siento porque mi corazón me duele al amarte tanto. Porque una sola vida no es suficiente para expresar todo lo que tengo dentro. Al final, he decidido no buscar una definición para definirte más, porque estoy seguro de que cualquier definición sería demasiado corta para ti.

¿De qué cielo has caído? Tienes una forma de ser y amarme que no es de este mundo. Tus abrazos son mi hogar, el único lugar donde me siento protegido y nunca quiero irme. Tienes el poder de detener el tiempo, de conmoverme con un «te quiero», de hacerme feliz con una mirada. Porque tus ojos tienen el brillo que ilumina mi alma y tus manos el camino de la felicidad, por el cual quiero caminar contigo toda mi vida.

Tengo mucha suerte de poder decirles todo esto. Para poder decirte que me llenas en todos los sentidos en los que una mujer puede sentirse llena. Me siento enormemente orgullosa de ser la persona que ocupa tu corazón, de tener el privilegio de que me digan lo que sientes por mí, mirándome a los ojos y la satisfacción de pensar, que me alegro de no poder definirte, porque un gran amor no se define, se siente.

Sólo puede ser verdad cuando no hay definición posible y espero que nunca encuentres esa definición, sino que sólo la encuentres en mis ojos, en mis caricias y en los besos que sólo una mujer enamorada como yo podría dar.

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Por todo eso, gracias por elegirme para estar contigo, por dedicarme todo lo que sientes, por dejarme sin aliento con cada beso, por protegerme siempre y por enamorarme todos los días con un gesto o una sonrisa. Eres la mejor suerte del mundo. Todo lo bueno que me ha pasado en esta vida, nunca puede igualar el hecho de haberte encontrado.

Te quiero niño mío, eres mi mayor tesoro y el único capaz de hacerme sentir todo lo que siento.

Carta al amor de mi vida hombre 2

Dicen que sólo amamos a quien conocemos y yo estoy de acuerdo, ¿pero sabes algo? Mi amor por ti espera ser despertado, porque incluso el amor tiene su debido tiempo. No quiero apresurar el reloj, al contrario, espero con paciencia porque sé que Dios está cuidando cada detalle. No me desespero porque todavía no sé con seguridad quién eres, dónde estás o cuál es tu historia, pero sé que nuestra historia comenzará a su debido tiempo.

No tienes que preocuparte porque mi corazón se pone triste y de vez en cuando me siento herido, decepcionado, eso pasa, ¿no? No te preocupes y no dejes que te quite la paz, porque mi corazón está siendo cuidado por Dios y aunque a veces las cosas se agitan, Él sigue cuidándolo.

No espero que seas perfecto, no espero un hombre perfecto, sino un hombre que me ame y que no sólo diga que me ama, sino que me haga sentir amado. No necesitas cambiar quién eres para encajar en el patrón del mejor hombre del mundo para complacerme, sólo necesitas ser…. tú. Con tus defectos y fracasos, tus manías más raras y tus sueños, ya sean grandes o pequeños.

Creceremos juntos, no sólo en sabiduría, sino también en fe y amor. Rezaremos juntos, ¿qué te parece? Caminaremos con Dios. Cuando caigas, extenderé mi mano para ayudarte a levantarte y sé que harás lo mismo conmigo. Te abrazaré cuando me necesites y siempre seré tu amigo. No nos rendiremos a los días malos o a los malentendidos que sucederán, sino que nos refugiaremos en Dios en esas tormentas que la vida trae consigo.

Para ser honesto, no quiero contarte todos los detalles de lo que espero e incluso sueño, pero necesito que sepas que no es mi intención dejar que el miedo me impida encontrarte. Tal vez estás cerca, tal vez no. Y todo está bien, porque no te busco desesperadamente, sino que te espero con paciencia. A su debido tiempo, el amor despertará, está en nosotros confiar en Dios.

Carta al amor de mi vida hombre 3

Tú mi amor, sólo tú me has enseñado lo que es vivir lleno de emociones, lo que es tener una nueva ilusión que seguir, firme ante las pruebas que la vida nos ha traído, la razón para tener una alegría día a día, la emoción de saber que hay alguien que piensa en mí en cualquier momento de su vida. Tú eres el hombre que más amo en este mundo por quien puedo dar todo de mí, tú eres el hombre que posee mi alma, mi vida y mi corazón. Tú, hijita mía, eres el amor de mi vida, el ser más especial de este mundo, el hombre que adoro y el que se ha ganado todo mi amor. Siempre le daré gracias a Dios por ponerte en mi camino. Eres la persona que siempre soñé tener a mi lado, con quien compartir mis miedos, mis alegrías, mis frustraciones, contigo puedo abrirme a ver la vida de otra manera, quiero que sepas que te quiero, que te respeto y que admiro todo lo que haces desde que somos novios para que nuestra relación funcione. Eres alguien maravilloso en toda la extensión de la palabra, me has cuidado, apapachado y amado mucho. Hoy siento paz y felicidad a tu lado. Mi amor, desde que te conozco me dedico a amarte, mi vida es amarte, el amor es mi sueño, el amor es mi despertar, el amor es mi presente y mi futuro, el amor es mi alma, quiero amarte porque sin amarte no vivo, sin amarte no sé cómo vivir, para amarte respiro, porque lo único que me interesa en este mundo es amarte, quiero amarte con pasión, con sinceridad, con ternura, con entrega total, con todos mis sentimientos para que seas el hombre más feliz de este mundo. Hijo Mío: Ten siempre presente todo lo que te amo, porque esto que siento por ti es un sentimiento limpio, mis palabras son sinceras porque son verdades que te digo, te amo, te amo, te amo, te amo y que están grabadas en lo más profundo de mi corazón. Mi corazón es tuyo, mis sentimientos son tuyos, mi cuerpo es tuyo, cada parte de mí es tuya, pero hay algo que sólo es mío, ¿y sabes lo que es? El hecho de saber que me amas. Mi amor, eres la cosa más bella y grandiosa que tengo. Te amo como nunca he amado a nadie antes. Cuando no estoy contigo siento un vacío dentro de mí que no puedo llenar, y cuando estés conmigo no dejes de sonreír… Tú eres toda mi vida y mi corazón es sólo para ti. Hemos estado juntos por 6 meses y parece que fueron 6 años. Desde el primer día siento como si te conociera de toda la vida, ¿o fue algo que fuimos en otra vida? No sé, lo único que sé es que te siento cada día más cerca de mí. Gracias por estar ahí cuando te necesito, gracias por escucharme, por entenderme y por miles de otras cosas. Tú lo eres todo para mí. Estar contigo me tranquiliza y me hace la mujer más feliz del mundo. Quiero decirte que te quiero para siempre a mi lado como mi novio, como mi amigo, como mi confidente, como mi amante, como lo estás haciendo hasta ahora. Tú eres la persona más importante para mí en este momento, y quiero que sigas siéndolo por el resto de mi vida, porque no podría vivir sin ti mi amor. Amo todo de ti, porque estoy enamorado de ti, no hay nada de ti que no quiera, que no ame, cada parte de ti se me une como un rompecabezas, y encaja perfectamente porque yo estoy para ti y tú estás para mí. Las razones que tengo hoy para decirte que te amo son muchas. Pero te voy a dar una en particular, contigo he aprendido algo nuevo y es valorar lo que la vida nos da cada día, la oportunidad de tener gente tan maravillosa, gente en la que estás y de la que eres el más importante. Te quiero tanto, mi preciosa, que no quiero perderte por nada del mundo, no quiero separarme de ti porque tú eres la razón de mi vida. Siempre contarás conmigo, siempre estaré a tu lado mi amor, siempre te amaré, admiraré y respetaré. Te amo por todo lo que eres, te amo por todo lo que compartes conmigo, te amo por todo lo que me muestras, te amo por todas estas cosas y más.

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Quiero que sepas que te daré todo lo que quieras, porque para mí lo primero es tu felicidad. Eres incomparable y sabes cómo amar. Por eso hay personas que te aman y quieren que seas feliz, pero ese amor no se compara con el amor que tengo por ti, porque lo que siento por ti es algo grande, infinito y eterno. No sé cómo agradecerte por lo que has hecho por mí, me llenas de tanta alegría, emoción y esperanza, que no hay manera de agradecértelo. Sólo quiero que recuerdes que te amo hoy, que te amaré y que continuaré amándote por siempre. Te amo con todo mi ser y mi alma.

Carta al amor de mi vida hombre 4

No siempre se llega a la vida de la gente en los momentos adecuados, de hecho muy pocos tienen la suerte de tener la oportunidad de conocerse y encajar, es entonces cuando se crea el llamado «Cuento de Hadas», donde todo es perfecto, donde las faltas son mínimas o simplemente nulas, donde el amor puede hacerlo todo y luego si existe tal «Felizmente para siempre» de todos esos cuentos de hadas con los que muchos sueñan.

Entré en tu vida después de una tormenta en mi corazón, después de tirar por la borda cualquier posible esperanza de amor, justo cuando pensaba que todo estaba perdido y estaba decidido a estar solo, estaba cansado de las excusas e historias habituales, de enamorarme de los ideales de la gente y no de la gente. Llegué a tu vida y de repente todo empezó a ser perfecto, tal como yo lo había soñado, porque por supuesto…. lo tenías todo; tenías todo lo que yo siempre había anhelado, tu personalidad coincidía con la mía, nadie podía entender mi mente de la manera en que lo hacías, tus ideas y las mías conectadas más que cualquier otra cosa en el planeta, compartíamos los mismos gustos, con sólo miradas entendíamos todo lo que pasaba en lo más profundo de nuestro ser -incluso considerándote como mi alma gemela y diciéndoselo a todas las personas a las que pregunté acerca de ti-. Marqué tu nombre en mi piel, sin tener que usar letras, caminamos en pequeños pedazos de cielo.

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Pero… Colorín colorado esta historia ha terminado y ni siquiera ha comenzado?

Todos somos adictos a algo, yo por ejemplo soy adicto al amor, especialmente a ese tipo de amor imposible que nunca será, ese amor terrible que te hunde en las profundidades del universo, ese es un vicio imposible de dejar. Ese tipo de amor/amor que crea una locura sin sentido. Confieso que sentí amor por ti, amor que consume, que se apodera de todo tu cuerpo, que cuando sientes que termina, la vida se va con él. Me enamoré de ti sin esperar nada a cambio, nada más que amor correspondido, algo que nunca fue, porque el amor simplemente es o no es, no hay intermediarios y si no lo sientes, no puedes forzar al otro a sentirlo, así es como el corazón no funciona. Pero aprendí a ver cómo me amabas a tu manera, a entender tus dulces miradas después de alejarme de un abrazo o incluso de tus poemas entre líneas que esperabas que entendiera; una serie de detalles que me llenaban cada vez más, que me daban alas, que me hacían volar tan alto y mi corazón latir mil veces por segundo, que me dolía tanto amarte, sobre todo porque tenía miedo de no poder amar a nadie más que a ti.